CHA apuesta por un Plan de Regadíos propio para Aragón


EUROPA PRESS. Zaragoza

CHA demuestra la "demagogia, falsedad y peligrosidad del Pacto del Agua". Según el partido, el texto "lleva a un camino más corto hacia el trasvase del Ebro", al considerar que "una vez hechas las grandes presas no existen garantías suficientes para que los usos de sus caudales derivados se queden en Aragón".

Chunta Aragonesista ha apostado por un Plan Nacional de Regadíos Horizonte 2008 propio para Aragón, durante la presentación este miércoles de un informe sobre el Plan Nacional de Regadíos (PNR). En el texto se muestra que la capacidad reguladora prevista en el Pacto del Agua no se ajusta a la demanda prevista para Aragón en dicho Plan.

Dicho informe fue presentado esta por el presidente de CHA, Bizén Fuster, el responsable de CHA en Asuntos económicos, empleo y Desarrollo Rural, Pedro Lobera, y el coordinador del documento y secretario territorial de CHA en el Altoaragón, Salvador Ariste. En concreto, el planteamiento de CHA contempla la ampliación de 47.000 nuevas hectáreas y la mejora de 142.000, una auditoría de la situación actual, la selección de zonas mejorables y modernizables, ahorro efectivo de agua, mejores condiciones financieras para el regante, medidas de fomento del ahorro del agua y tarificación para los excesos. También incluye la determinación de nuevas transformaciones, condiciones de acceso a los nuevos regadíos, agilización de la concentración parcelaria y medidas agroambientales, cálculos reales de consumos y ahorros y adaptación de la política de regadíos a la política hidraúlica.

"Muy lejos" de la capacidad reguladora

En este sentido el informe indica que el PNR, que en el horizonte 2008 alcanza los 272 hectómetros cúbicos, trasladándolo al año 2020 la demanda de usos agrícolas, urbanos e industriales ascendería a menos de 700 hectómetros cúbicos, cantidad que se encuentra "muy lejos" de la capacidad reguladora que se pretende en Aragón con el actual y vigente Pacto del Agua, que alcanzaría la cifra de 2.200 hectómetros cúbicos.

Unos datos, que según destacan desde CHA demuestra la "demagogia, falsedad y peligrosidad del Pacto del Agua", puesto que "nos lleva a un camino más corto hacia el trasvase del Ebro", al considerar que "una vez hechas las grandes presas no existen garantías suficientes para que los usos de sus caudales derivados se queden en Aragón", con lo que "la trampa está servida". Como conclusiones principales del informe, Fuster indicó que desde CHA "estamos conformes con las cifras que se plantean" en el convenio firmado entre el Gobierno de Aragón y la Administración central sobre el PNR, así como en lo relativo a los plazos, necesidades de inversión y presupuestos destinados.

Además, consideró necesario elaborar un Plan Nacional de Regadíos para Aragón, con el fin de establecer las necesidades y priorizar las ejecuciones, al tiempo que reseñó como importante adecuar las cifras de regulación previstas en el Pacto del Agua a las demandas contempladas en el PNR, ya que al respecto, apuntó que las cosas "se han hecho al revés".


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