EFECTOS DEL PLAN HIDROLÓGICO NACIONAL SOBRE EL TRAMO FINAL DEL EBRO. CAUDALES NECESARIOS PARA EL BUEN ESTADO ECOLÓGICO.

Narcís Prat. Catedrático de Ecología, Universidad de Barcelona.

Carles Ibáñez. Doctor en Biología, SEO/BirdLife.

 

Actualmente no es posible realizar estimas cuantitativas de lo que supondría para el Bajo Ebro la detracción de 3.347 Hm3/año para abastecer nuevos regadíos y de 1.050 Hm3/año para el trasvase hacia otras cuencas. Dependerá del régimen de caudales que exista en el río después de estas detracciones. Asimismo, no existe información suficiente que permita discriminar con claridad entre los distintos escenarios planteados por el Ministerio de Medio Ambiente:

Sin embargo, se conocen bien de manera cualitativa las principales consecuencias de la modificación del régimen de caudales y puesta en marcha de nuevos regadíos como consecuencia de la aplicación del Plan Hidrológico Nacional:

TRANSPORTE DE SEDIMENTOS. Habrá, todavía, un menor aporte de material sólido a la llanura deltaica, y por tanto se dará:

Pero lo más importante es que:

CUÑA SALINA. Se dará una mayor permanencia temporal de la cuña, por disminución y regulación del caudal fluvial, que conducirá a:

CALIDAD DEL AGUA. Actualmente ya deteriorada, se verá agravada especialmente a causa del incremento de regadíos en la cuenca, que producirán:

CONTAMINACIÓN por plaguicidas y otros contaminantes. Tanto el trasvase como el plan de regadíos provocaran efectos negativos a causa de:

ARROZALES. Los nuevos regadíos en la cuenca, en la medida que afectarían a la calidad del agua del río, producirían efectos negativos en el sentido de:

Por otra parte, la detracción de agua de los canales de riego supondría la desaparición de parte de la superficie cultivada por falta de recursos hídricos y la disminución de aportes de agua y nutrientes a las bahías. En todo caso, la substitución de arrozales debería seguir las siguientes pautas:

HUMEDALES. Se verán afectados negativamente:

FLORA Y FAUNA. Afectación sobre la conservación de:

BAHIAS Y CULTIVOS MARINOS. El mantenimiento de este ecosistema se vería comprometido en el caso de reducción del caudal de agua dulce aportado y el incremento de la carga específica de nutrientes. Se darían efectos como:

BANCOS PESQUEROS

 

Estudios a realizar

Es importante destacar la extrema complejidad de los sistemas y la dinámica de una zona como la que nos ocupa. Los conocimientos previos que se tienen sobre el Delta del Ebro hacen factible detectar la problemática actual y las necesidades básicas para su buen funcionamiento. En cambio, ya se ha mencionado que no existe la información necesaria para concretar cuantitativamente muchos de los efectos previsibles de la detracción de caudales y pérdida de calidad del agua debidos a las transformaciones en la cuenca y/o a los trasvases.

Por tanto, es urgente el inicio de programas de investigación que mejoren el conocimiento de los procesos clave en cada una de las unidades ambientales y permitan una mejor prospectiva de los cambios futuros si las transformaciones o derivaciones se llegaran a realizar.

De acuerdo con el análisis de la información existente, en la Tabla 1 se resumen los trabajos de investigación que se deberían desarrollar en el futuro.

 

 

 

 

ECOSISTEMA FLUVIAL

Aportaciones hídricas

- Obtención de medidas fiables de régimen de caudales y estimación correcta de las tendencias futuras

- El efecto de la aforestación sobre la disminución de los recursos hídricos

- El efecto del cambio climático sobre los recursos hídricos

- Efecto de los nuevos regadíos sobre el caudal hídrico

- Efecto de la regulación del río por los embalses sobre el régimen hídrico

Caudal sólido

- Viabilidad de la liberación de los sedimentos retenidos en los embalses y sus condiciones de transporte

- Caracterización fisico-química y biológica de los sedimentos a transportar

Calidad del agua

- Evolución de la salinidad y relación con los caudales

- Eutrofización y comunidades algales: evolución de nutrientes y floraciones algales

- Otros contaminantes: detección, seguimiento y toxicidad

Comunidades biológicas

- Cambios en las poblaciones de macroinvertebrados bentónicos

- Profundizar en los requerimientos ecológicos de Margaritifera auricularia

- Flora y vegetación de ribera: estudios para su restauración

- Macrófitos: dinámica y evolución

- Estudio del impacto negativo de las barreras fluviales en los peces y propuestas para el favorecimiento de las poblaciones de especies autóctonas

ECOSISTEMA DELTAICO

Subsidencia

- Control y seguimiento de la elevación relativa con respecto al nivel del mar de varias estaciones en el Delta

- Viabilidad del transporte de sedimentos por los canales de riego

Contaminación por plaguicidas

- Detección, seguimiento y evaluación de toxicidad

Arrozales

- Optimización del cultivo. Efectos de las medidas agroambientales y del cultivo ecológico sobre las comunidades de organismos

- Restauración y transformación en humedales

Humedales (lagunas)

- Programa de seguimiento de bioindicadores

- Programa de restauración, especialmente de los efectos de la eutrofización

- Efecto de diferentes regímenes hídricos

Fauna vertebrada

-Efectos de la disminución de los recursos tróficos en las poblaciones de aves marinas (especialmente Gaviota de Audouin y Pardela Balear)

- Evaluación de las superficies mínimas de arrozales necesarias para la conservación de las poblaciones de vertebrados actuales

- Estudio del impacto negativo de la modernización de la red hidrográfica en la fauna y seguimiento de sus efectos

ECOSISTEMA MARINO

Bahías

- Programa de seguimiento de los indicadores ambientales y más específicamente de los episodios de anoxia

- Interacción entre la maricultura y el ecosistema de las bahías

- Efecto de los vertidos de los canales sobre las bahías

Producción pesquera

- Efectos de la disminución de caudales y variación del régimen hídrico sobre la producción pesquera

 

Tabla 1.- Algunos de los aspectos a estudiar en el tramo final del Ebro para obtener los necesarios conocimientos de base y su dinámica evolutiva.

 

 

 

 

 

 

 

 

Directrices para un nuevo modelo de gestión del agua en el Bajo Ebro

La gestión del agua en el bajo Ebro debe basarse en un sistema que sitúe en pie de igualdad los usos del agua con la preservación de los valores ambientales, sociales y económicos de la zona. El régimen hídrico del río debe respetar y conjugar adecuadamente todas estas características.

Con estas premisas básicas, antes de abordar cualquier planificación es imprescindible establecer un sistema integrado de gestión de toda la parte baja del Delta -desde Mequinenza/Riba-roja hasta el mar-, fundamentado en estudios científicos previos que determinen cuales han de ser los principales criterios que deben dirigir la gestión de los caudales de agua y sedimentos. Este sistema debe ser interdisciplinar, dando cabida a todos los usuarios, aunque debe ser independiente de ellos y con una marcada presencia de científicos, técnicos y conservacionistas, encargados de asegurar que la garantía de agua para todos los usos quede supeditada al buen estado ecológico del río y del Delta de acuerdo con lo que estipula la Directiva Marco del Agua aprobada en Diciembre del 2000.

Para mantener la funcionalidad ecológica, social y económica del río, el sistema de gestión debe contemplar varios apartados, para los cuales a continuación se definen también los caudales y regímenes hídricos que, en primera instancia y según los datos disponibles, se evalúan como necesarios (ver Tabla 2). Estos caudales se dan en forma de horquilla de mínimos y máximos ya que dada la inseguridad actual de su cálculo, la variabilidad natural esperada de estos sistemas y la necesidad de estudios mas profundos sobre el tema es imposible actualmente dar un valor límite. Los diferentes aspectos considerados en esta evaluación preliminar de lo que sería un caudal sostenible en el bajo Ebro se encuentran en la tabla citada y se resumen a continuación:

Funciones ambientales:

Funciones económicas:

 

 

FUNCIÓN

PERÍODO

CAUDAL MEDIO

(m3/s)

RANGO DE CAUDAL (m3/s)

APORTACIÓN MEDIA

(Hm3/año)

RANGO DE APORTACIÓN (Hm3/año)

Caudal básico

1 mes

80

 

207

207

Contención cuña salina en Deltebre

8 meses

135

120 - 150

2.800

2.489 – 3.111

Cuña salina en la desembocadura

3 meses

350

300 - 400

2.722

2.333 – 3.110

Contención de anoxia en cuña salina

40 días

350

300 - 400

743

622 - 864

Crecidas (sedimentos y sistema marino)

1 mes

1.500

1.000 – 2.000

2.980

2.000 – 4.000

Renovación de bahías y lagunas

12 meses

19

 

0

0

TOTAL FUNCIONES AMBIENTALES

 

 

 

9.452

7.651 – 11.292

Regadíos Delta del Ebro

6 meses

45

 

700

 

Medidas agroambientales arrozales

4 meses

24

 

250

 

Trasvase a Tarragona

12 meses

4

 

126

 

Navegabilidad

12 meses

120

 

104

 

Regadíos previstos en el PNR

12 meses

2,8

 

86

 

TOTAL FUNCIONES ECONÓMICAS

 

 

 

1.266

 

TOTAL

 

 

 

10.718

8.917 – 12.558

 

Tabla 2.- Caudales hídricos necesarios para el tramo final del Ebro. Nota: en el cálculo de aportaciones medias, ya se han descontado

las de distintas funciones que están solapadas en el tiempo.

En total pues, las necesidades básicas se encuentran en el rango de los 8.900-12.500 Hm3/año, siendo necesaria la realización de estudios más detallados para una cuantificación más precisa.

Figura 1.- Aportaciones anuales (en Hm3) del río Ebro en Tortosa durante el período 1979/99.

En los últimos 20 años (periodo entre 1979/80 y 1998/99) no se ha llegado en muchas ocasiones a esta aportación necesaria (ver Figura 1).

Según los datos expuestos por tanto, resulta muy difícil garantizar un trasvase de 1.050 Hm3/año de forma continuada si lo que se desea es diseñar un sistema de gestión adecuado para el mantenimiento de los usos y necesidades ambientales del tramo final del Ebro (ver Figura 2).

Por otra parte, las futuras perspectivas de reducción de las aportaciones por el efecto combinado del aumento progresivo de cobertura forestal de la cuenca y del cambio climático, merecen una atención especial e ineludible de cara a la planificación futura del uso de los recursos hídricos de la cuenca del Ebro y hacen mucho mas problemática la garantía de trasvase.

 Figura 2. Esquema del régimen hídrico considerado óptimo para el mantenimiento de la funcionalidad ecológica y socieconómica del tramo final del Ebro.